La Atención Plena.

Para
practicar
la Atención Plena
debemos estar atentos
y completamente despiertos.
Cuando
nos sentamos
en un estado de 
atención plena, nuestra
mente y nuestro cuerpo pueden
estar completamente relajados
y en paz.
Pero
no confunda
este estado de 
cosas con algo que
no es.
Este
este tipo de
relajación es muy
diferente del tipo de 
estado mental semiinconciente
y despreocupado que surge de la 
siesta o el descanso.
Simplemente
descansar o dormitar
no tiene nada en común
con la atención plena.
¿Por que?
Porque
cuando descansamos
nuestra mente entra en 
una cueva oscura, aunque
relajante.
Sin
embargo, cuando
estamos atentos, estamos
tranquilos pero también completamente alerta y despiertos.
Tenga
en cuenta que cuando
dormimos o descansamos
estamos evadiendo la realidad
por un tiempo.
Sin
embargo cuando
meditamos y nos dedicamos
a la atención plena, no buscamos
evadir la realidad, sino encontrarla
de una manera serena.
Por
lo tanto, quien está
atento no debe estar menos
alerta que quien conduce un
vehículo.
¿Por que?
Porque
al igual que un 
conductor somnoliento
probablemente tendrá un accidente, un practicante de atención plena que no esté completamente despierto probablemente sufrirá pensamientos dispersos, así como olvidos.
Por
lo tanto, cuando
practicamos la atención plena
debemos apuntar a estar alerta
como un artista de circo caminado
sobre la cuerda floja, realizando nuestras actividades sabiendo que una pérdida de concentración podría resultar en una caída prolongada.
O deberíamos
ser un tigre, avanzando con pasos suaves pero deliberados, alertas y serenos al mismo tiempo.
Es importante notar
que necesitamos adquirir este tipo de vigilancia antes de que podamos experimentar nuestro despertar completo.
Así
que esfuerces por tratar sus sentimientos más desafiantes, como el dolor y el odio, con gentileza y respeto. No se resista a ellos. En cambio, vive en paz con ellos, mientras meditas en su interdependencia con otros objetos en tu vida."

Thich Nhat Hanh en Español

Las cinco (5) prácticas de la atención plena. II.

Cuarta Práctica

Consiste del sufrimiento provocado por la charla irreflexiva y la incapacidad de escuchar a los demás, me comprometo a escuchar atentamente y dirigirme con amabilidad a todo el mundo para aportar alegría, felicidad a los demás y aliviar de ese modo su sufrimiento. Consciente de que las palabras pueden generar felicidad o sufrimiento, me comprometo hablar con veracidad y emplear palabras que inspiren alegría, esperanza y confianza en uno mismo.

También hago el voto de no difundir noticias de las que no esté seguro y a no criticar ni condenar a nadie de las cosas de las que no esté convencido.

También me abstendre de pronunciar palabras que puedan provocar disección o discordia o romper la familia o la comunidad.

Me comprometo a hacer todo lo que esté en mi mano para contribuir a la reconciliación de las personas y a la resolución de los conflictos por pequeños que sean.

Quinta Práctica

Consciente del sufrimiento provocado por el consumo indiscriminado, me comprometo a cultivar bla salud, tanto física como mental y tanto mia como de mi familia y de mi sociedad, comiendo, bebiendo y consumiendo cuidadosamente.

Hago el voto de ingerir tan sólo aquellos alimentos que contribuyan al mantenimiento de la paz, el bienestar y la alegría de mi cuerpo, de mi conciencia y del cuerpo y la conciencia colectiva de mi familia y de mi sociedad.

Thich Nhat Hanh

Namaste… 2da parte.

Las cinco (5) Prácticas de la atención plena.

Protegen
nuestra libertad y embellecen nuestra vida.

Y, en tanto que guía para la vida cotidiana, constituyen también el fundamento de la felicidad del individuo, de la pareja, de la familia y de la sociedad.

Primera Práctica

Consiste del sufrimiento provocado por la destrucción de la vida, me comprometo a cultivar la compasión y aprender formas de proteger la vida de personas, animales, vegetales y minerales.

Hago el voto de no matar, de no permitir que los demás maten y de no apoyar, con mis pensamientos o con mis acciones, acto alguno que provoque la muerte en el mundo.

Segunda Práctica

Consciente del sufrimiento provocado por la explotación, la injusticia social, el robo y la opresión, me comprometo a cultivar el amortiguador compasivo y aprender formas de contribuir al bienestar de personas, animales, vegetales y minerales.

Hago el voto de practicar la generosidad compartiendo mi tiempo, energía y mis recursos materiales a quiénes realmente los necesiten.

Hago el voto de no robar y no apropiarme de nada que no me pertenezca. Respetaré la propiedad ajena, no permitiré que nadie se aproveche del sufrimiento humano, o de las especies que pueblan la Tierra.

Tercera Práctica

Consciente del sufrimiento provocado por la conducta sexual incorrecta, me comprometo a cultivar la responsabilidad y aprender formas de proteger la seguridad en integridad del individuo, la pareja, la familia y la sociedad.

Hago el voto de no involucrarme en relaciones sexuales despojadas de amor y de un compromiso a largo plazo.

También estoy decidido, para conservar mi felicidad y la de los demás, a respetar mis compromisos y los compromisos ajenos.

Haré todo lo que esté en mi mano para proteger a los niños del abusó sexual y evitar que la conducta sexual inadecuada provoque la separación de parejas y familias.

Thich Nhat Hanh

Namaste… 1ra.parte