Semillas Estelares.

¿CÓMO SABER SI ERES UNA SEMILLA ESTELAR?

Las semillas estelares son aquellas almas que nacieron en otro sistema solar u otro lugar del Universo antes de su primera reencarnación en la Tierra.

Su personalidad se verá determinada en función del lugar en el que se hayan encarnado por primera vez.

CARACTERÍSTICAS DE LAS (semillas estelares).

  • No puedes explicar por qué, pero sabes que no eres de este mundo. Desde que eras joven has sentido que simplemente eras diferente de otras personas, y sabes que no estás hecho para tratar de encajar con ellas y prefieres tu vida solitaria.
  • Tu experiencia de vida ha sido difícil, o al menos desafiante y esto te ha llevado a un rápido crecimiento personal.
  • El llamado: sientes una gran atracción por la espiritualidad y crees firmemente que todo es energía, también nuestro Ser y nuestro cuerpo.
  • Seas un alma joven o vieja, todavía tienes mucha sabiduría y conocimiento para compartir, incluso si no puedes explicar de dónde lo obtuviste. Mantener tu Equilibrio emocional.

ERES UNA PERSONA MUY SENSIBLE.

  • Te sientes más profundamente motivado por la idea de que estás aquí para ayudar a otras personas de alguna manera.
  • En muchas ocasiones sientes una gran frustración e impotencia.

Estás devastado por la cantidad de oscuridad que existe en el mundo, y si pudieras, tu misión personal sería ayudar a cada persona, animal o parte de la naturaleza que está en apuros. y mantener la paz, y tu ser es el silencio interior.

  • Vives una vida completa y auténtica. No tienes ningún interés en seguir las normas, tradiciones o ideas de otras personas sobre cómo deberían ser las cosas.

TE SIENTES MUY CONECTADO A LA NATURALEZA.

  • Te sientes muy conectado a la naturaleza y sabes que el Universo es un todo. Quieres saber qué más existe ahí fuera, y sabes que no estamos completamente solos.
  • Siempre te has sentido como un extraño, como si este planeta no fuera tu verdadero hogar, sino un lugar que se te ha encomendado visitar por un tiempo.
  • El no encajar o no sentirte en tu lugar te causó muchos conflictos al crecer porque querías encajar y sentirte en paz. Pero ahora entiendes que esto formó parte de tu proceso de crecimiento emocional, mental y Espiritual.
  • Haces lo que sabes que es correcto y justo, en todo momento. Lo que es coherente para ti.
  • ERES UN ESPÍRITU TOTALMENTE LIBRE.

.• Eres un espíritu libre. No te sirven las estructuras establecida por el sistema, sino las que están en armonía con la naturaleza y con tu Ser.

  • Antes de encarnarnos, la memoria se borra.

Sin embargo, tú retienes algo de esa memoria y a veces te vienen recuerdos de cómo era tu hogar real o cómo eran tus vidas anteriores (AKASH)

ERES NATURALMENTE CREATIVO Y ARTÍSTICO.

  • Algo mágico sucede cuando empiezas a escribir, pintar, cantar, bailar o MUSICAL, hacer cualquier otra forma de expresión creativa, sientes casi como si una fuerza más allá de ti mismo se apoderara de ti y creara a través de ti. Esto se llama canalización, y lo haces a menudo y te conectas con el cosmos.
  • Eres existencial por naturaleza. Te preguntas muy a menudo por qué estamos aquí y qué significa todo esto.
  • En cierto momento de tu vida, comenzaste a darte cuenta de que tus diferencias eran realmente tus fortalezas y que tratar de ser como otras personas quieren que seas es contraproducente e incoherente para ti. Así que tratas de ser cada vez más tú mismo.
  • Eres muy escéptico con las principales instituciones, rompes REGLAS en la Tierra: gobierno, educación, religión, salud, etc.
  • En el fondo sabes que no eres originalmente parte de este mundo… y estás aquí para ayudar a crear uno nuevo.
    Entonces muy probablemente eres una ( Semilla Estelar).
    Te identificas?

Almas Esterales.


𝗟𝗼 𝗲𝘅𝗽𝗹𝗶𝗰𝗮𝗿á𝘀 𝗺𝗶𝗹 𝘃𝗲𝗰𝗲𝘀, 𝘆 𝗻𝗼 𝘁𝗲 𝗲𝗻𝘁𝗲𝗻𝗱𝗲𝗿á𝗻. 𝗟𝗼 𝗿𝗲𝗽𝗲𝘁𝗶𝗿á𝘀 𝗰𝗼𝗻 𝗱𝗶𝗳𝗲𝗿𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀 𝗽𝗮𝗹𝗮𝗯𝗿𝗮𝘀, 𝘆 𝘀𝗲𝗴𝘂𝗶𝗿á𝗻 𝗱𝗶𝗰𝗶é𝗻𝗱𝗼𝘁𝗲 𝗹𝗼 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼. 𝗟𝗼 𝗲𝘅𝗽𝗼𝗻𝗱𝗿á𝘀 𝗱í𝗮 𝘁𝗿𝗮𝘀 𝗱í𝗮, 𝘆 𝗱í𝗮 𝘁𝗿𝗮𝘀 𝗱í𝗮 𝗹𝗼 𝗺𝗮𝗹𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝗽𝗿𝗲𝘁𝗮𝗿á𝗻…

Pero no depende de ti. Depende de ellos, de su estado de conciencia, de sus expectativas, de su capacidad de comprensión.

Por tanto, lo que piensen no te define. Simplemente los define a ellos. Tú estás aquí para realizarte a tu manera, y para dar las explicaciones justas a quien creas que debes dárselas o a quien tenga la suficiente capacidad de comprensión.

𝗗𝗮𝗿 𝗲𝘅𝗽𝗹𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗱𝗲𝘀𝗴𝗮𝘀𝘁𝗮. 𝗘𝘅𝗽𝗼𝗻𝗲𝗿 𝘁𝘂 𝗺𝘂𝗻𝗱𝗼 𝗮 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗻 𝗻𝗼 𝗹𝗼 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗿𝗲𝗻𝗱𝗲, 𝗱𝗲𝘀𝗴𝗮𝘀𝘁𝗮. 𝗧𝗿𝗮𝘁𝗮𝗿 𝗱𝗲 𝗾𝘂𝗲 𝗮𝗹𝗴𝘂𝗶𝗲𝗻 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝘀𝘁á 𝗮 𝗮ñ𝗼𝘀 𝗹𝘂𝘇 𝗱𝗲 𝘁𝘂 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗽𝗲𝗰𝘁𝗶𝘃𝗮 𝘁𝗲 𝗲𝗻𝘁𝗶𝗲𝗻𝗱𝗮, 𝗱𝗲𝘀𝗴𝗮𝘀𝘁𝗮. 𝗗𝗲𝘀𝗴𝗮𝘀𝘁𝗮 𝗺𝘂𝗰𝗵𝗼.

Y, además, no es tu labor en este mundo. Por ello, da las explicaciones justas a las personas correctas. Y si no lo ves estrictamente necesario, no des explicaciones A NADIE.

Tú no tienes que justificarte. No tienes que ir detrás de los demás para que estén felices y a gusto con lo que eres, piensas y haces.

𝗦𝗶 𝘁𝘂 𝗰𝗼𝗻𝗰𝗶𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗲𝘀𝘁á 𝗲𝗻 𝗽𝗮𝘇, 𝗾𝘂𝗲 𝗰𝗮𝗱𝗮 𝗰𝘂𝗮𝗹 𝘀𝗲 𝗿𝗲𝘀𝗽𝗼𝗻𝘀𝗮𝗯𝗶𝗹𝗶𝗰𝗲 𝗱𝗲 𝗹𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗹𝗲 𝘁𝗼𝗰𝗮. 𝗤𝘂𝗲 𝗰𝗮𝗱𝗮 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮 𝗮𝗽𝗿𝗲𝗻𝗱𝗮 𝗮 𝗴𝗲𝘀𝘁𝗶𝗼𝗻𝗮𝗿 𝘀𝘂𝘀 𝗲𝘀𝘁𝗮𝗱𝗼𝘀 𝗲𝗺𝗼𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹𝗲𝘀 𝘀𝗶𝗻 𝗱𝗲𝗽𝗲𝗻𝗱𝗲𝗿 𝗱𝗲 𝘁𝘂 𝗿𝗲𝘀𝗽𝘂𝗲𝘀𝘁𝗮. 𝗣𝗲𝗿𝗺𝗶𝘁𝗲 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝗹 𝗼𝘁𝗿𝗼 𝗰𝗿𝗲𝘇𝗰𝗮 𝘆 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗿𝗲𝗻𝗱𝗮 (𝗽𝗼𝗿 𝘀í 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼) 𝗾𝘂𝗲 𝘁ú 𝗻𝗼 𝗲𝘀𝘁á𝘀 𝗮𝗾𝘂í 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗵𝗮𝗰𝗲𝗿 𝗳𝗲𝗹𝗶𝘇 𝗮 𝗻𝗮𝗱𝗶𝗲, 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝘀𝗼𝘀𝘁𝗲𝗻𝗲𝗿 𝗮 𝗻𝗮𝗱𝗶𝗲, 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗹𝗮𝗰𝗲𝗿 𝗮 𝗻𝗮𝗱𝗶𝗲…

Ahora me vendrán con el cuento espiritual del «egoísmo». Con tu exceso de responsabilidad para con los demás. Con tu culpabilidad por que los demás no estén “bien”, cuidaditos, atendiditos, satisfechitos… “Contentos” contigo.

Eso es lo que quiero que veas de cerca. El exceso de responsabilidad en el que has estado viviendo. Tu miedo a decepcionar y a no complacer. Lo cual te está desgastando, consumiendo y apartando de tu verdadero ser desde que naciste.
Vivir así no es vivir. No es libertad. No es paz. Es una tela de araña que te envuelve y de la que algún día tendrás que salir. “

¿𝗬 𝗰ó𝗺𝗼 𝗹𝗼 𝗵𝗮𝗴𝗼?”. 𝗛𝗮𝗰𝗶é𝗻𝗱𝗼𝗹𝗼. 𝗛𝗮𝗰𝗶𝗲𝗻𝗱𝗼 𝘁𝘂 𝘃𝗶𝗱𝗮. 𝗗𝗲𝗷𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗱𝗲 𝗿𝗲𝘀𝗽𝗼𝗻𝘀𝗮𝗯𝗶𝗹𝗶𝘇𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗲𝗻 𝗲𝘅𝗰𝗲𝘀𝗼 𝘆 𝗱𝗲 𝗯𝘂𝘀𝗰𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝗮𝗽𝗿𝗼𝗯𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗱𝗲 𝘁𝗼𝗱𝗼𝘀. 𝗖𝗼𝗻𝗳𝗶𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗲𝗻 𝗹𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝘁ú 𝗲𝗿𝗲𝘀 𝘆 𝘀𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀. 𝗘𝘀𝗼 𝗻𝗼 𝗲𝘀 𝗵𝗮𝗰𝗲𝗿 𝗱𝗮ñ𝗼. 𝗘𝘀𝗼 𝗲𝘀 𝗿𝗲𝗮𝗹𝗶𝘇𝗮𝗿𝘁𝗲. 𝗔𝘀í 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝘅𝗽𝗹𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝘆 𝗷𝘂𝘀𝘁𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀, 𝗹𝗮𝘀 𝗷𝘂𝘀𝘁𝗮𝘀.

Quien no lo entienda, que se ponga a llorar. Y que luego aprenda a gestionarse emocionalmente. Tú no serás responsable de eso. Faltaría más.

Y si esto te remueve, está bien. Es lo que quería con este texto: pinchar en tu creencia hasta que sangre; indagar en tu “buenismo” culpable y mega-responsable… Ir al fondo de tu abismo y liberarte de tiranos infantiles e inmaduros emocionales.

𝗡𝗼 𝘁𝗲 𝗰𝗼𝗻𝘃𝗶𝗲𝗿𝘁𝗮𝘀 𝗲𝗻 𝗼𝘁𝗿𝗼 𝗱𝗲 𝗲𝗹𝗹𝗼𝘀. 𝗣𝗼𝗻 𝗰𝗼𝗵𝗲𝗿𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗲𝗻 𝘁𝘂 𝘃𝗶𝗱𝗮. 𝗬 𝗲𝗻𝘀𝗲ñ𝗮 𝗰𝗼𝗻 𝘁𝘂 𝗲𝗷𝗲𝗺𝗽𝗹𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝘀𝘁𝗮𝗺𝗼𝘀 𝗮𝗾𝘂í 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗵𝗮𝗰𝗲𝗿𝗹𝗼 𝗮 𝗻𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗮 𝗺𝗮𝗻𝗲𝗿𝗮, 𝗻𝗼 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝘀𝗲𝗿 𝗯𝘂𝗿𝗱𝗮𝘀 𝗰𝗼𝗽𝗶𝗮𝘀 𝗱𝗲 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮𝘀 𝗱𝗼𝗴𝗺á𝘁𝗶𝗰𝗮𝘀, 𝗶𝗻𝗰𝗼𝗻𝘀𝗰𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀 𝗲 𝗶𝗿𝗿𝗲𝘀𝗽𝗼𝗻𝘀𝗮𝗯𝗹𝗲𝘀.

-Almas Estelares-

¿Soy una semilla estelar?

Por Paul Wagner.

Hay mil millones de estrellas en el Universo observable. Aunque ese número es enorme, imagina los miles de millones de reinos y planetas que están ocultos a la vista. Imagina las distancias que aún tenemos que recorrer. Considera la posibilidad de que el tiempo no existe, y de que toda la materia cambia o se expande en cada momento. ¿Podría ser que el número de estrellas, galaxias, planetas y reinos sea dinámico y, por tanto, incalculable? Esto haría que su nacimiento en la Tierra fuera un acontecimiento planificado, una elección previa al nacimiento o una casualidad.

Cuando nos preguntamos por nuestros orígenes, podríamos considerar que la Tierra es uno de los muchos experimentos, durante una época en la que colaboraciones de razas alienígenas sembraron estrellas y planetas para hacer crecer nuevos mundos. Cuando morimos y elegimos reencarnarnos, parece que tenemos muchas opciones. Como almas amorfas y viajeras, no sólo tenemos que considerar este planeta, sino muchos otros a lo largo de los miles de millones de galaxias, reinos y universos, y dentro de muchos continuos del espacio-tiempo. Es así como nuestras almas pueden haber nacido mil veces en mil galaxias diferentes. También podríamos estar viviendo vidas simultáneas y conjuntas en una variedad de lugares, y dentro de varias plataformas de espacio-tiempo.

La Tierra es un planeta tridimensional, estable y en evolución, con un equilibrio igual de experiencias físicas y angélicas. Debido a esto, millones de semillas estelares pueden haber elegido vivir entre nosotros, esperando servir o beneficiarse de nuestro estilo de vulnerabilidad, de los ciclos kármicos de renacimiento de la Tierra y de la continua expansión de nuestro planeta.

¿Cómo se ha informado el ser humano sobre las semillas estelares?

Las ideas y conceptos en torno a las semillas estelares nos llegan a través de canalizadores y videntes que se conectan regularmente con los registros akásicos. Estos registros comprenden las impresiones energéticas de todas las intenciones, pensamientos, emociones, relaciones, creaciones y eventos que han ocurrido en todas las razas, en todos los reinos y en todo el espacio-tiempo. Mientras que mucha de esta información es relativamente fácil de canalizar y comprender, hay varias perspectivas sobre cómo las semillas estelares vienen a la Tierra y los muchos tipos de semillas que existen.

¿Qué es una semilla estelar?
Según los canalizadores, las semillas estelares son seres espirituales avanzados, procedentes de otros planetas y reinos, que poseen conocimientos espirituales y científicos que se remontan a cientos de miles de años. Parece que mientras la mayoría son seres benévolos que buscan ayudar a todos los seres vivos a través de todos los reinos y universos, algunas semillas estelares buscan controlar los recursos interplanetarios para el beneficio de sus planetas de origen.

La mayoría está de acuerdo en que son almas viajeras de otros planetas que encarnaron en la Tierra para inspirar, curar a los seres humanos, y participar en la evolución del planeta. También es posible que sean descendientes físicos de alienígenas de otros mundos, que viajaron a la Tierra para ser trabajadores de la luz en nuestro planeta.

Las semillas estelares también podrían haber nacido a través de la concepción entre consciencias, nacimientos vírgenes, similares a las historias sobre Jesús. Otra posibilidad es que cualquier alma pueda convertirse en una semilla estelar cuando otra le infunde luz intencional. Esto puede ocurrir cuando las almas están en el útero o en cualquier otro momento de sus vidas.

En cualquier caso, parece que las semillas estelares existen, de una forma u otra. Puede que nunca sepamos qué conceptos de las Semillas Estelares se acercan más a la verdad.

¿Cómo saber si eres una semilla estelar?
Es posible que tengas la sensación de que vienes de algún lugar más allá de este planeta, puede imaginar tu apariencia física de vidas anteriores, en otros mundos. Tal vez fantasees con la vida en otras galaxias con la esperanza de encarnar en otro lugar en futuros nacimientos. También puede que te preguntes cómo llegaste aquí y si alguna vez volverás. Incluso con estos sentimientos reales de alineación con otros mundos, puede que nunca sepas si eres o no genuinamente una semilla estelar.

Todos buscamos pertenencia, alineación o parentesco con una persona, familia, grupo, cultura o sociedad. Para llenar nuestro corazón e inspirarnos, anhelamos la aceptación y la conexión. Para ayudarnos a identificar a qué lugar pertenecemos, nos adornamos con etiquetas que nos hacen sentir especiales o únicos. Podemos decir: “Soy un siete en el Eneagrama”, o “soy un católico en recuperación”, o “soy un demócrata conservador”. Incluso podríamos decir: “Soy una semilla estelar, pleyadiana, para ser exactos”.

Tanto si se basan en la verdad como si no, nos encantan nuestras auto-identidades temporales: las construcciones de personalidad con las que creamos nuestros personajes, relaciones y vidas. Cuando los títulos y arquetipos tradicionales nos fallan, buscamos en otra parte, incluso en las estrellas.

Esto no quiere decir que tu realidad como semilla estelar sea incorrecta. Es para ofrecer la idea de que algunas, si no todas, de nuestras identidades de nacimiento, imaginadas y asumidas podrían ser ilusiones.

Fuente:

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